desprendimiento placenta

¿Qué es y cuales son las causas del desprendimiento de placenta?

La placenta es la responsable de que el oxígeno y los alimentos pasen de la madre al feto. Por eso su desprendimiento es un grave problema durante la gestación.

¿Qué es un desprendimiento de placenta?

Se trata de la separación parcial o total de la placenta, de la pared del útero. (Antes de que el bebé haya nacido). Cuando ocurre después del nacimiento, se llama alumbramiento (última fase del parto).

El desprendimiento puede ocurrir durante el segundo y tercer trimestre. Cuando pasa en el primero, desencadena en aborto, siendo una de las principales causas por las que se puede perder un bebé en ese periodo.

¿Cuáles pueden ser las consecuencias de un desprendimiento de placenta?

  • Puede ser causa de muerte fetal (15% de los casos)
  • Mucho más riesgo de que el bebé nazca con bajo peso.
  • Parto prematuro.
  • Muerte del bebé.
  • Puede causar la muerte de la madre.

¿Cómo ocurre el desprendimiento de placenta?

El problema aparece justo donde se une la placenta con la superficie del útero, donde está alojada. Puede ser debido a que se rompa un vaso sanguíneo de la placenta o de la madre, provocando que se acumule sangre y acabe disecando y desprendiendo la placenta.

Cuanto mayor va siendo el desprendimiento, el aporte de oxígeno y alimentos para el bebé van disminuyendo.

En mucho de los casos el problema se debe a una alteración de la placenta, ya que los vasos sanguíneos de ésta no se fijan bien en la pared del útero en los primeros meses de gestación y esto puede provocar que tu tensión esté alta o retraso en el crecimiento fetal. Y al final conlleva a una mayor predisposición a que la placenta se desprenda.

Factores de riesgo y causas del desprendimiento de placenta

En general no hay una causa exacta. Sobre todo en casos crónicos. Algunas de las causas de los casos más agudos pueden ser:

  • Traumatismo abdominal (por un accidente o caída).
  • Uso de drogas.
  • Cuando hay un exceso de líquido amniótico.
  • Hipertensión.
  • Antecedentes de desprendimiento en otro embarazo.
  • Embarazo gemelar.
  • Rotura de bolsa amniótica.
  • Factores demográficos: + de 35 años, consumo de tabaco, + de tres embarazos, etc.

Síntomas del desprendimiento de placenta

  • Sangrado vaginal: Aparece en la mayoría de los casos. La cantidad no tiene porque indicar la gravedad, ya que muchas veces la sangre queda atrapada entre la pared del útero y la placenta. Por eso ante cualquier sangrado, por mínimo que sea, hay que consultar con el médico inmediatamente, que con una exploración y una ecografía hará un diagnóstico. En ocasiones el sangrado podría deberse a una placenta previa.
  • Contracciones intensas y dolor abdominal: provocado por la eliminación de unas sustancias llamadas prostaglandinas que son eliminadas cuando se libera la sangre que se encuentra entre la pared del útero y la placenta.

Si el desprendimiento se agrava y afecta a más de la mitad de la placenta puede poner en peligro la vida de la madre y la del bebé.

A veces se pueden tener pequeños desprendimientos y estos pasar desapercibidos. Ante cualquier sospecha, acude al médico.