A veces puede parecer que no hay un momento conveniente para estar embarazada: siempre hay algún viaje, alguna fiesta o algún evento especial que sientes que te estás perdiendo. Pero puedes aprender a disfrutar de cualquier época del año en la que te encuentres mientras lidias con antojos extraños y pies hinchados. Sigue leyendo para conocer algunos consejos que te ayudarán a sobrevivir a las fiestas navideñas estando embarazada.
Haz que todo gire en torno a ti
La mejor forma de disfrutar de las ajetreadas navidades estando embarazada es bajar el ritmo. El crecimiento de tu bebé es tu prioridad número uno, y tus amigos y familiares deberían estar más que de acuerdo. Entenderán que tengas que moderarte con las fiestas, las compras en grupo y los viajes de larga distancia.
Sobre todo si es tu primer bebé, dedica algo de tiempo a ti y al tiempo que pasas con tus amigos y familiares: el año que viene, todo girará en torno a tu pequeño. Disfruta de todas tus actividades navideñas favoritas, siempre que no sean demasiado agotadoras.
No temas darte un capricho
Es demasiado fácil ceder a todas las obligaciones que nos imponen las navidades y el fin de año, lo que puede hacer que corramos de un lado para otro intentando asistir a todas las fiestas y reuniones familiares, pero lo que más necesitamos ahora es descansar. Es más, sé consciente de tu descanso. Avisa a tus familiares y amigos de cuándo vas a acostarte para que no te molesten.
Por supuesto, tendrás que saltarte el ponche de huevo, pero no tengas miedo de darte un capricho con algunos sabrosos cócteles sin alcohol y deliciosos postres. Aunque sigas necesitando una dieta sana y equilibrada, no te preocupes demasiado por las calorías. Por supuesto, ¡asegúrate de beber mucha agua!
Pide ayuda cuando la necesites
Todos tus seres queridos quieren que te sientas lo mejor posible y que cuides de ti misma y de tu pequeño. Una parte importante de cuidarse es dejar que los demás te ayuden. De todos los momentos de la vida para dejar de lado las tareas navideñas, el mejor es ahora. Si te sientes culpable por estar sentada en el sofá todo el tiempo, ¡puedes ayudar un poco! Haz descansos frecuentes.
Si te agobias intentando ayudar con todo lo que sueles hacer, no le harás ningún bien a nadie. Tu cuerpo está pasando por muchas cosas, no importa en qué etapa del embarazo estés; no te sientas mal si no puedes hacer todo lo que hacías el año pasado.
Comienza pronto la campaña navideña
Aunque pienses tomártelo con calma, hay mucho que hacer durante las fiestas. Hay regalos que comprar y envolver para los seres queridos, y árboles que poner y adornar con luces. Puede que tengas que prepararte para recibir a amigos o familiares, o que alguien más sea el anfitrión y tú estés preparando el viaje navideño... hay mucho que hacer.
La clave para unas fiestas sin estrés es empezar pronto. Empieza a comprar regalos lo antes posible y tómate tu tiempo para envolverlos. Pide a algunos amigos que te ayuden a limpiar, decorar y hacer más acogedora tu casa. Planifica los viajes con antelación.
Todo lo que puedas hacer para minimizar el estrés te ayudará a pasar unas fiestas relajadas, ¡y podrás centrarte en la emoción de tener a un nuevo miembro en la familia la próxima temporada!
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