Náuseas y vómitos, síntomas del embarazo

Náuseas y vómitos durante el embarazo

Las náuseas y los vómitos son compañeros inseparables para muchas mujeres en el embarazo. ¿Cuál es su origen? ¿Pueden tener consecuencias para la salud de la madre y del bebé? Lo que necesitas saber sobre las náuseas y los vómitos.

Las hormonas responsables de las náuseas al principio del embarazo

Aunque el origen de las náuseas aún no está claramente establecido, se cree que hay dos factores principales que contribuyen a ellas: el estrógeno y la gonadotropina coriónica (hCG), la llamada hormona del embarazo. El cuerpo comienza a segregarlas cuando el embrión se implanta en el útero, desencadenando una serie de mecanismos que conducen a esta sensación de náuseas y a veces de vómitos.

Al principio del embarazo, la producción de hCG sigue una curva ascendente, pero se estabiliza con bastante rapidez y comienza a disminuir alrededor de las semanas 12 a 14. Por lo tanto, las náuseas y los vómitos generalmente tienden a desaparecer entre el tercer y cuarto mes.

Los niveles de estrógeno, relacionados con la función de la placenta, siguen aumentando durante el embarazo. El resultado es a veces períodos más largos de vómitos, aunque este fenómeno sigue siendo poco frecuente.

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Náuseas: el estrés puede intensificarlas

Aunque algunas mujeres están más dispuestas que otras a sufrir estos trastornos, el aspecto psicológico y la personalidad de cada mujer juegan un papel clave: cómo trata estos síntomas, la importancia o falta de importancia que se les da, el umbral de tolerancia de cada individuo... Otro factor que aumenta la sensación de náuseas y el malestar general es el estrés. Esta es a menudo la razón por la que las mujeres primíparas (que están a punto de dar a luz por primera vez) suelen sufrir más náuseas: no son conscientes de este estado y están -lógicamente- más ansiosas.

Algunos investigadores creen que las náuseas y la necesidad de rechazar ciertos alimentos son una forma de que el cuerpo proteja a la madre y al niño de las enfermedades que pueden causar. Pero se debe tener cuidado de no sufrir de deshidratación.

Vómitos leves del embarazo

El vómito es común en el comienzo del embarazo y afecta al 30-50% de las mujeres en la 6ª a 14ª semana de amenorrea (después del inicio del último período menstrual). Ciertos medicamentos recetados por un médico pueden utilizarse para combatir estas náuseas. La abundancia y el momento en que se producen estos trastornos varían y, por lo general, no tienen un efecto grave en el estado general de una mujer.

Vómitos severos del embarazo

En casos raros, los vómitos pueden ser más graves. Se producen con mayor frecuencia, después de cada comida y en los cambios de posición. Se acompaña de un aumento de la salivación, del estreñimiento y del mal aliento.

El curso de los vómitos severos es variable. La mayoría de las veces, la recuperación completa se observa alrededor del tercer o cuarto mes. A veces, por el contrario, se produce un empeoramiento, con pérdida de peso y deshidratación, un estado general que se deteriora, respiración y pulso que se aceleran mientras la presión sanguínea baja y la orina se vuelve menos abundante. En estos casos graves, el tratamiento requiere la hospitalización.

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